En este tercer single, el artista antes conocido como Uner, experimenta y ahonda en su personalísima forma de entender el jazz y la electrónica, lares en los que se mueve con destreza, conmoción y valentía.
Nin3s lo ha vuelto a hacer. Y para ello no ha tenido que hacer nada más que lo mejor que sabe hacer: música. Y la que prefiere -el artista antes conocido como Uner, desde su residencia en USA– tiene mucho que ver con el jazz y con la clásica; pero, también con la electrónica que tan bien conoce y con todo ese imaginario nuevo de sonidos urbanos a los que se ha sabido acercar para nutrirse de su emergencia y rabiosa contemporaneidad.
‘KHOKHOBA’
‘Khokhoba’ es el tercer single de Nin3s. Y en él sigue la brillante estela de los dos primeros lanzamientos, del que será su primer álbum ‘Hopeyard’ (Dorado Records) y que verá la luz en abril. En esta ocasión presenta una canción -que lo es de principio a fin- en la que lleva su visión jazzística y electrónica hasta espacios en los que la sensibilidad instrumental y vocal alcanza a pellizcar al oyente en lo más profundo.
Tras un comienzo sintetizado, con querencia ambiental, todo cambia y emerge la minimalista y cautivante melodía de un piano -instrumento canónico y referencial para Nin3s– y, sin más dilación, irrumpe la ensoñadora voz, cantando en zulú, de Toshi Tikolo y esas ya habituales baterías acústicas y rotas, del maestro Matt Cooper, grabadas en Londres. A continuación, evolucionan expansivas capas de sonido real, imaginado y manufacturado a fuego lento y pecho descubierto. Suena desgarro tras el destello difuso de los metales y el Mellotron. Todo desprende una melancolía dulce, un epicismo familiar que se antoja abisal a pesar de lo cercano de su emoción. Y, sobre todo, un mirar para atrás con tanto agradecimiento como admiración. Eso mismo que deberíamos sentir todos, sin excepción, cuando nos asomamos al alma de nuestros mayores.
CON LA VOZ DE TOSHI TIKOLO
Para este nuevo corte, Nin3s ha colaborado por primera vez con la ya referida Toshi Tikolo, una cantante y compositora sudafricana que trabaja habitualmente con el DJ y productor Black Coffe, entre otros.
En este ‘Khohoba’ escribe y canta a su abuela -la persona que la crío en Ciudad del Cabo- en una bellísima y conmovedora oda al paso del tiempo haciéndolo con honor, que tiene un mensaje implícito: por muy difícil que sea nuestra vida siempre podemos encontrar la felicidad, solo hay que buscarla con toda el alma. Lo encantador y único de su tono de voz nos retrotrae, incluso, a la legendaria Édith Piaf en una pirueta sonora y temporal que solo un genio puede haber imaginado y propuesto. La vida en negro.
Hay que destacar el extraordinario trabajo que, como ingeniero de sonido, como en todos los tracks vocales de Nin3s, ha desarrollado, desde L.A. el prestigioso productor discográfico y compositor norteamericano Sebastian Morton, habitual en temas de Sting, Seal, Donna Summer o Mary J. Blige, entre otras muchas estrellas mundiales. Un maestro absoluto en fusionar los mundos de la producción electrónica moderna y la composición orquestal melódica más tradicional.
UN VIDEO HECHO POR FAUNA NOCTURNA CON INTELIGENCIA ARTIFICIAL
El video es obra de Fauna Nocturna, como los anteriores. Iban Padilla ha generado un personaje virtual con Inteligencia Artificial y a través de largos y varios procesos de monitorización de los movimientos faciales del propio Nin3s -que se grabó cantando el track- pudieron extraer los datos para procurarle a la “chica virtual” esa, tan alucinante, evolución digital hacia el envejecimiento.
ANTES UNER…
En septiembre de 2019, adelantándose a lo que sería el evento histórico que dejaría paralizado al mundo, y ante el asombro y la incredulidad de toda la industria de la música electrónica y, sobre todo, de sus seguidores Manu retiraba a UNER de la escena. Y lo hacía aupado en lo más alto del escalafón como DJ y productor… en lo mejor de su propia fiesta. En ese momento, los mejores clubs del planeta lo querían contratar -pagando cachés con muchos ceros- para pinchar en sus fiestas más celebradas; los sellos más prestigiosos del mundo se rifaban publicar sus nuevos temas; atesoraba cientos de miles de seguidores en sus redes sociales y era portada de los más relevantes magazines del clubbing planetario.
En aquel momento, nadie entendió, aunque muchos especularon erróneamente, por qué UNER, sin aparente previo aviso público, ponía fin a una carrera que le había procurado, por méritos propios, enorme fama, una posición económica fantástica y un apabullante éxito mundial solo al alcance de pocos elegidos. Lo tenía todo y podría haber seguido muchos más años así; pero, de pronto decidió parar. Tras ello, vino un profundo y largo silencio. Casi el olvido. Solo un puñado de amigos y fans, los más cercanos y fieles, se preguntaban entre ellos, en las redes sociales y en los foros de Internet, dónde estaba UNER, a qué se estaba dedicando ahora, qué era de su vida…Era el fin, o eso nos hizo creer.
…AHORA NIN3S
Años después, en algún lugar de USA, una gran águila americana salía de una cueva, luciendo nuevo y afilado pico, flamantes y poderosas garras y un plumaje a estrenar, tras haber pasado cinco meses recuperándose, curando las profundas heridas que ella misma se había causado, con el fin de renovar su físico y vida, hasta el punto de poder alargarla 30 años más. Tras ello, emprendió un vuelo de renovación, renacimiento y festejo por haber sido capaz de no entregarse a un fin sin capacidad ser principio de nada.
No muy lejos de allí, el músico, DJ y productor Manu García (Lleida, 1977), tras el que se encontraba el artista conocido antes como UNER, en su nueva, feliz y tranquila vida a caballo entre Connecticut y España, dedicaba casi todo su tiempo precisamente a eso: a renovarse para no morir ni en lo artístico ni en lo espiritual y seguir creciendo hasta límites aún no imaginados. Ni siquiera por él mismo. Y, además, había conseguido hacernos creer a todos, propios y extraños, que nada de eso estaba sucediendo.
Durante tres intensos y largos años invirtió parte de lo ganado -y ahorrado- en sus años dorados de bolos por clubs de todo el mundo (dicen, los que más saben del asunto, que fue uno de los pocos dj-tops que no se lo fundió todo en coca y lujos) y de vender miles de copias de sus tracks, en seguir formándose como músico, en abrir su mente a nuevos estilos y géneros, en adquirir nuevos y vanguardistas conocimientos técnicos en las mejores universidades norteamericanas, en establecerse en otros terrenos artísticos como la composición de bandas sonoras, o incluso la producción cinematográfica, en establecer vínculos profesionales con maestros –“los mejores en lo suyo”- que le pudieran enseñar cómo llegar más allá… El principio, de nuevo.
Lo muchísimo aprendido y trabajado, en la oscuridad de un voluntario anonimato y la soledad de su estudio durante aquellos años, tenía una gran razón de ser, planeada ya desde 2017, cuando empezó a escribir tanto esta historia como el nuevo sonido: dar vida y activar este proyecto que ahora presenta, con el que regresa y que da nombre a su nueva etapa: NIN3S. Y es que no hay final sin principio. Y, al contrario. (Fernando Fuentes, marzo 2022)
‘Khokhoba’ es el tercer single del álbum de debut de NIN3S que se titulará ‘Hopeyard’ y que verá la luz en abril de 2022, a través de Dorado Records (UK).