Este inquieto y talentoso artista madrileño presenta -a través de ‘Blackout EP’ (Log Lady Records) cinco nuevos temas -con la producción de Pshycotic Beats- en los que un ensoñador trip-pop es capaz de hacernos sanar. Estamos ante un oasis sonoro -misterioso y sexy- que nadie en su sano juicio sonoro se debería de perder.
Texto: Fernando Fuentes
-Alo L.O.O.F., te descubrimos hace dos años, creo recordar, con aquel primer y notable EP ‘Flash the Massive’ y en este nuevo Blackout EP’ vemos algunas diferencias sustanciales, como por ejemplo que ahora compones de forma más orgánica, directa y elaborada… ¿ha sido algo consciente, es cosa de ir mejorando o, simplemente, las cosas han salido así?
Cuando compuse ‘Flash the Massive’, lógicamente mis conocimientos relacionados con la producción musical eran mucho más limitados. Son canciones más abstractas, aparte de porque sus temáticas lo sean, la manera de componer era un poco más “informática”. Estaba adentrándome en el mundo de la música electrónica, y al fin y al cabo cualquier proyecto musical tiene una fase de rodaje, y una fase de exploración y búsqueda de sonido.
-¿Qué culpa de ello ha tenido dejar en manos de Pshycotic Beats la producción del EP?
Desde luego Andrés hizo un trabajo de maestro con ‘Flash the Massive’. Yo le pasé las maquetas, burdas, y le dije: haz lo que puedas con esto. A Andrés le gustaron mucho, precisamente por su sencillez y le aportó el toque de varita mágica que resultó en las canciones tal y como las podéis escuchar ahora. En ‘Blackout’, yo ya tenía todo mucho más orquestado. Desde los sonidos específicos, la estructura, pasando por la temática y el concepto. Creo que el trabajo de Andrés con ‘Blackout’ ha sido más exigente precisamente porque tenía menos libertad de acción. Al final ha conseguido mantener la esencia y aportar músculo y armonía a los temas.
-¿Cómo ha sido la experiencia de trabajar junto a él? ¿En qué se nota más? ¿Repetirás?
Por supuesto. Aparte del trabajo en la producción y mezcla, Andrés me ha ayudado muchísimo en temas de distribución, cómo y dónde vender/colgar mi música… Gracias a él estoy empezando a entender el trabajo real que hay más allá de componer música. Además, creo que musicalmente nos entendemos muy bien y eso se ve reflejado en el disco.
-¿Hasta qué punto le has dejado meter mano en tu imaginario sonoro? Lo digo porque algunos me suenan mucho- y bien siempre- a Pshycotic Beats…
Como te decía antes, en este ‘Blackout’ el trabajo previo era muy avanzado y tenía las ideas muy claras, pero por supuesto Andrés ha aportado una paleta sonora y una garra a las canciones muy propia de él. Tiene mucho de Pshycotic Beats porque al fin y al cabo está producido por el con mucho mimo, y se nota su buen gusto.
-¿Te gusta la etiqueta de trip-hop sanador que te han puesto algunos periodistas? ¿O prefieres lo de sexy y oscuro?
Cuando Marta Echeverría -de ’Hoy empieza todo’/Radio3- se refirió a ‘Blackout’ como un EP “sexy y oscuro” la verdad es que me hizo mucha gracia, me sentí halagado. Aun así, no me gustan las etiquetas, no metería a mi música en un género concreto, porque bebo de muchos. Que cada uno establezca los lazos o referencias que considere, yo no voy a contradecir o molestarme con las opiniones del resto.
-En los temas que contiene este ‘Blackout EP’ juegas con sonidos y texturas que atrapan por su rareza onírica y su naturaleza lisérgica, ¿eres de los que sueñan despiertos o prefieres hacerlo de verdad?
Desde luego, siempre que compongo trato de dejarme llevar, indagar en lo más profundo de mi ser. A veces llegando a lugares incómodos pero necesarios. A esa parte individual y oscura que todos tenemos y ocultamos a la sociedad. Me gusta bucear en el subconsciente para crear los sonidos y las melodías. El resultado sin duda es bastante onírico, aunque también me apetece trabajar temas más concretos, sociales y luminosos en próximos trabajos. Ya veremos qué sale.
-Así, en general, las melodías sintetizadas del EP parecen arregladas hasta la obsesión, ¿trabajaste tanto en ellas, como parece? ¿Y en las baterías?
Hay muchas horas de trabajo en todas las canciones. En ocasiones, compongo un arreglo, le meto un par de baterías y la canción se queda ahí varios días, incluso semanas, y luego vuelvo a ella con otro estado de ánimo, quizá, y la sigo trabajando. También a veces me pongo a hacer collages entre ellas, mezclar los sonidos, ver qué funciona y qué no… Generalmente, mis canciones van de la mano de estados de ánimo y sensaciones concretas, y partiendo de esa base etérea, genero el resto de la estructura y la temática concreta.
-Vamos a curiosear: ¿De cuáles de estos artistas y bandas crees que tiene más este ‘Blackout EP’: Depeche Mode, Radiohead, New Order, Stone Roses y James Blake? ¿Nos dejamos algunos?
Pues te diría que tienen un poco de todos y de ninguno. Sin duda, la banda que más ha influido no sólo en mi música, si no ya en mi propia vida ha sido Radiohead. Yo quiero hacer lo que hacen ellos. Quiero hacer viajar a la gente, y sin duda ellos lo hacen, además de una forma muy exquisita y original. En la actualidad, James Blake creo que es uno de los pocos músicos que está haciendo cosas realmente “nuevas” (aunque su último disco no me ha acabado de entrar del todo).
-De entre todas las canciones del EP me quedo con el trip-pop misterioso, sofisticado y oscuro de ‘Change of Speed’ en el que tu voz, entre épica y altiva, me recuerda mucho a la de Thom Yorke, ¿cómo surge este tema y fue su proceso compositivo?
Este tema surge de una necesidad de modificar ciertas actitudes autodestructivas. Cuando das un “volantazo” a tu vida y empiezas a recorrer otro camino, pero te das cuenta de que no puedes cambiar lo que eres y echas la vista atrás para volver hacia dónde estabas, aceptándote a ti mismo con tus aciertos y fallos.
-También me ha gustado mucho ‘Fullmoon Breath’ con ese sonido electrónico, opresivo y cold-wave, con fuerte ramalazo a los primigenios New Order, sobre todo al bajo de Peter Hook, ¿es también uno de tus temas favoritos del EP? ¿Cuáles son?
A ‘Fullmoon Breath’ le tengo mucho cariño porque es una canción que compuse con la banda Mamera (banda de rock previa a L.O.O.F.). Salió un buen temazo y no me pude resistir a “reversionarla”. Yo creo que mi canción favorita del disco es ‘Haze’. En cuanto al contenido, ‘Going Home’ y ‘Change of Speed’ también significan mucho para mí.
-Finalmente quiero destacar especialmente y preguntarte por ‘Haze’, ¿cómo conseguiste sinergiar melodías étnicas -entre Ravel y ‘El Amor Brujo’ de Falla- con bases esencialmente urbanas, ¿invitándonos a un viaje emocional entre precipicios y abismos íntimos?
Esto es curioso. Compuse ‘Haze’ el mismo día en el que me enteré de que no me habían dado una residencia artística que presenté para Matadero. Se la dieron a Ojo Último. Al principio, lógicamente me dio rabia, y luego dije: coño, voy a escucharle. Me zampé el disco “el núcleo duro” de una tacada y me gustó tanto que me puse a componer en el acto, claramente influenciado por su música, también muy espiritual, onírica y lisérgica, como si saliera de una rave en mitad de la noche. Partiendo de esa base, le metí un compás de 6/4 y empecé a crear la estructura y cada sonido hasta lo que se convirtió en ‘Haze’.
-Finalmente L.O.O.F., ¿cuándo presentarás este EP en directo y cómo? ¿A través de un live con mucho de verdad encima del escenario?
Me muero de ganas de interpretar ‘Blackout’ en directo. El año pasado toqué unas cuantas veces y no quiero dejar de hacerlo nunca. Lo que quiero es poder ofrecer un auténtico espectáculo a quien quiera y pague por verme. Quiero sentir las canciones y hacer que el público las sienta (en menudo berenjenal me meto). Aún estoy preparando el directo y todavía no tengo en mente ninguna fecha. Quizá después de verano. Lo que sí tengo claro es que voy a tratar que sea algo nuevo e impactante.